miércoles, 30 de junio de 2010
El triunfo de la antideportividad
Lo del fin de semana pasado en el circuito de Valencia fue, una vez más, un fracaso de la deportividad, como viene siendo habitual en este deporte en los últimos años, especialmente con un piloto determinado al que todo se le aguanta, todo se le permite, e incluso, como el otro día, todo se le premia.
Probablemente dejaré a partir de ahora de ver la Fórmula 1. Y yo soy de los que siguen este deporte (bueno, esta pantomima de deporte, ya) desde cuando nadie lo hacía. Cuando el piloto español que corría era Adrián Campos, y no quedaba precisamente el primero. Pero visto lo visto, no tiene sentido ver algo que no tiene mucho que ver con el deporte.
Con todo esto ¿qué se quiere transmitir? Pues que aquel deportista que tiene una actitud menos deportiva en lo que realiza, tendrá muchas más probabilidades de éxito.
Es así de claro, y así de triste.
Y se da en otros muchos deportes, especialmente los más mediáticos. Sin ir más lejos, en el Mundial de fútbol que se está celebrando, hemos podido ver actitudes de jugadores "nuestros", de la selección española, que no son precisamente modelo de nada, como Torres o Capdevilla, que fingiendo una agresión han provocado la expulsión del contrario. La última, la de Capdevilla, hoy mismo en el partido contra Portugal, a la que hemos ganado con un gol en fuera de juego que nadie comenta, porque no interesa. Y estos futbolistas, gracias a esas actitudes, tienen el premio de ser verdaderos ídolos en nuestro país. Impresionante, ¿verdad?
Como digo, lo peor de todo es que estas actitudes proliferan en deportes con un fuerte impacto mediático, y son incluso premiadas por muchos periodistas, que convierten a estos impresentables del deporte en verdaderas figuras, en verdaderos modelos a seguir.
Y yo me pregunto (y esto es lo que más me importa y preocupa del tema): Después de estas actitudes y las consecuencias que tienen, ¿cómo les explico yo a mis hijos las bondades de actitudes como la deportividad, el juego limpio o el compañerismo? ¿cómo les explico que con ese tipo de actitudes conseguirán ser los mejores en el mundo del deporte?
¿Cómo se lo explico si, entre otras cosas, es mentira?
viernes, 28 de mayo de 2010
Lo han vuelto a hacer
El caso es que salió una noticia en tono muy crítico, denunciando la práctica de algunos dueños de perros de caza de, una vez terminada la temporada, ahorcarlos en árboles o dejarlos atados hasta que mueran de hambre. Al reportaje, muy bien elaborado por cierto, y con imágenes bastante duras, le sucedió la noticia de la última corrida de San Isidro, y el "arte" con el que los toreros que participaron habían ajusticiado a las reses. A mí me dejó helado. Supongo que a muchas otras personas no.
Pues hoy ha vuelto a suceder. Ponen, también en Telecinco, un reportaje denunciando la escasa normativa que existe en este país para proteger los derechos de los animales, en comparación con otros países europeos que están a años luz de nosotros en sensibilidad en este ámbito. Ponen de ejemplo el trabajo que hace una protectora de animales para perseguir a dueños de perros que los tienen en condiciones lamentables de cuidado e higiene. Y dos noticias más tarde, se mofan del susto que se llevó en el día de ayer el presidente del At. Madrid cuando un toro se fue contra las vallas y estuvo a punto de saltar en el punto que este hombre se encontraba.
Y es que el ajusticiamiento de un animal en una corrida de toros debe ser muy gracioso.
jueves, 20 de mayo de 2010
Va por ti, Antonio
domingo, 16 de mayo de 2010
Mucho que cambiar
viernes, 30 de abril de 2010
Con licencia para matar
Le hice una foto al ciclista para que quedara constancia de la infracción.
Un poco más adelante otra pareja de municipales tenían retenido, pidiéndole la documentación, a un chico que estaba intentando vender en la calle cinco o seis abanicos (no tenía más) que había pintado. Ya me dirás tú el daño que ese chaval le hacía a los negocios de la zona. Vamos, para hundir la economía sevillana.
Pues nada, a perseguir a los pobres que hacen lo que pueden para ganarse la vida, y licencia para matar a los ciclistas sinvergüenzas que se saltan todas las normas.
Que conste que en absoluto reprocho la actitud de los policías municipales. Sé que ellos sólo cumplen órdenes. Y el alcalde y sus socios les tienen dadas órdenes de que dejen en paz a esos ciclistas que no respetan las normas básicas de convivencia, de la que ellos tanto hablan, supongo que porque eso les quitaría votos. El chaval de los abanicos no.
Imagino que los que son irresponsables siempre terminan votando irresponsablemente. Digo yo.
jueves, 22 de abril de 2010
Deportividad
En motociclismo pasa algo parecido con Valentino Rossi, que no termino de saber si es o no buen piloto, porque la mayoría de las veces gana haciendo trampas. Y llevamos dos años viendo como su compatriota Marco Simoncelli ha puesto literalmente en peligro la vida de varios pilotos y no ha sido ni muchísimo menos sancionado. Todo lo contrario. Encima le ponen la etiqueta de genio del motociclismo.
Destaca además por estar en un equipo, en un entorno, que en absoluto ayuda a esta postura, donde los directivos son modelo de muy pocas cosas buenas, por no decir ninguna. Adelanto que no soy barcelonista, ni mucho menos, pero reconozco que ayer el equipo de la ciudad condal sufrió un arbitraje que rozó la persecución. A mí me pareció increíble. Y en un ambiente llamemoslo "italiano", que es todo lo contrario a lo que encarna el espíritu deportivo. En esa tesitura, y con la tensión del encuentro aún a flor de piel, el entrenador del equipo contrario, el Inter de Milán, hizo todo lo posible, usando muy malas artes, por provocar a su homónimo del Barcelona. Creo que cualquiera en esas circunstancias habría caído en la trampa. Y precisamente por eso destaco las declaraciones de Pep Guardiola sobre Mourinho, que fueron las siguientes:
miércoles, 14 de abril de 2010
Hoy he sentido vergüenza
En esta temporada se habrán hecho partidos mejores, peores, habrán salido las cosas mejor o peor, pero esa actitud de todo el equipo de dejadez, de inoperancia, de falta de lucha,... desde los jugadores hasta el banquillo. No dar un pase en condiciones, perder cantidad de balones, no volver a defender, no saber lo que hacer delante del portero contrario,... Anda que si llega a estar Manolo Jiménez sentado en el banquillo, la que se hubiera montado. Pero no, leo los portales anaranjados de internet o la prensa deportiva, y nada, nadie da caña, nadie critica. Verdaderamente increíble.
No me considero un defensor a ultranza de Manolo Jiménez. Nunca me lo he considerado. Simplemente, desde siempre me ha indignado la actitud de algunos medios de comunicación de hundirlo a toda costa, y sobre todo, la actitud de buena parte de la afición que en plan borrego se ha ido tragando todas esas milongas y en vez de defender a su entrenador lo ha perseguido también. Eso es lo más duro.
Pero ahora la excusa ¿cuál es? Yo defenderé a Antonio Álvarez igual que he defendido a Manolo Jiménez, porque es el entrenador de mi equipo, y además es sevillista. Pero de verdad espero que llegue cuanto antes ese juego virtuoso que había prometido, porque lo de hoy, ante un equipo malo de solemnidad, que lo único que ha hecho ha sido correr, hemos hecho el más absoluto de los ridículos. Y el otro día, contra el Málaga, otro tanto de lo mismo. Lo que pasa es que el otro día nos sonrió la fortuna, esa misma que le volvió la espalda al Sevilla de Jiménez contra el Xerez, y que le costó el puesto. La fortuna. Bendita fortuna,... maldita fortuna.
Por favor les pido a estos jugadores que no me hagan avergonzarme más, que den la cara, que luchen, que corran,... que le tengan un respeto a ese escudo que llevan en el pecho, y que es tan importante para tantas personas.
lunes, 29 de marzo de 2010
Y ahora, ¿que?
No tengo absolutamente nada contra Antonio Álvarez. Creo que es un buen sevillista, tanto como Manolo Jiménez, y creo que va a dar su vida por este equipo, tanto como hizo Manolo Jiménez. Y además, es el entrenador del Sevilla F.C. y le deseo lo mejor, porque se lo deseo a mi equipo.
Si acaso, sí tengo que reporcharle sus aires de superioridad y su falta de modestia, menospreciando al técnico anterior, cuando dijo que quería devolverle al equipo el sello de Juande. ¿El sello de Juande?
Vamos a ver si nos enteramos. Evidentemente cada entrenador tiene un estilo y una forma de ver el fútbol. Pero en esencia, todos sabemos que el equipo marca mucho, mucho más que el entrenador. Sobre todo en plantillas de un cierto nivel. Precisamente donde se nota el buen entrenador desde el punto de vista táctico es en equipos modestos, y en los buenos equipos es donde se destapa el entrenador más "psicólogo", porque los jugadores ya son lo suficientemente buenos.
¿Qué quiero decir con esto? Pues que el Sevilla del traidor de la Mancha tendría un estilo, mezcla de lo que planteaba el entrenador y de los jugadores que había en el campo, y el de Jiménez otro. Y con Jiménez, por ejemplo a principios de esta temporada, creo que hicimos partidos de un virtuosismo alto, y con Juande, más de una vez y de dos, hicimos el ridículo de manera vergonzosa, y ahora resulta que crucificamos a Jiménez y ponemos en los altares a un señor que nos dio una buena patada en el trasero, y que después de eso ha sido cesado en tres equipos (bueno, cesado en dos y no renovado en uno, para los puristas). Eso a lo mejor significa algo, ¿no? Porque, si era tan magnífico... ¿por que lo cesan?
Al final, el juego del equipo es una mezcla de muchas cosas. Y Jiménez se ha equivocado, seguro, muchas veces. Y ha acertado también muchas. Y lo que a conseguido con este equipo ha sido mucho. Pero supongo que lo que Jesús Alvarado predijo hace tiempo se está cumpliendo, y nos estamos "mestallizando", y terminaremos al final como el Valencia, que por exigir la afición más de lo que se puede terminará vendiendo a sus estrellas, arruinado (bueno, arruinado ya lo está) y veremos cuanto tarda en caer de los puestos altos de la tabla.
Por favor, no perdamos nuestra modestia, porque desde ahí hemos cimentado nuestros éxitos.
Con todo esto,... suerte, Antonio (Álvarez).
jueves, 25 de marzo de 2010
Miedo me da
miércoles, 24 de marzo de 2010
Reflexiones sobre mi Sevilla F.C.
No soy de los que entienden o creen entender de fútbol, y espero aprender qué está pasando de las opiniones de los demás.
Una vez que he llegado a esta conclusión me pregunto de quién es la culpa, que es otra forma de decir qué se podría hacer para solucionarlo.
En principio el problema puede ser de aptitud (habilidades). Puede que tengamos un equipo menos potente de lo que llegamos a creernos en vista a los resultados del inicio de liga. He comparado los jugadores que intervinieron en el partido en Madrid que nos dio la última de las cinco copas, la supercopa de España y los que jugaron ayer contra el CSKA.
Hemos vendido algunos jugadores, básicamente Alves y Keita, que se notan en sus respectivas demarcaciones y a cambio hemos fichado jugadores que hasta ahora se han quedado en promesas, como Romaric, Negredo o Fernando Navarro y hemos tirado de cantera. El único fichaje brillante es el de Zokora.
Con un alto porcentaje de los mismos jugadores jugamos un fútbol mucho más feo, muy previsible y poco agresivo.
En principio parece que la forma física no es buena, que nos limitamos a jugar por las bandas y si el extremo consigue llegar a la horizontal del área la cuelga para que generalmente no haya ningún delantero disponible o éste no esté desmarcado (curiosamente tanto Perotti, como Navas están entre los 5 primeros jugadores en pases con 190 y 199 respectivamente y por supuesto no tenemos ningún delantero que haya marcado un número de goles que lo clasifique cerca del pichichi). La defensa es poco fiable, no podemos jugar a encerrarnos (véase el partido del Madrid, por ejemplo) y además no hacemos un contrataque decente: cuando el extremo roba un balón y llega arriba, resulta que no hay ningún delantero para rematar. El juego es eminentemente horizontal. No tiramos a puerta suficientemente, parece que ningún delantero quiere asumir la responsabilidad de culminar la jugada y nos pasamos el balón por el borde del área sin que nadie chute. Algunos jugadores clave, como Kanouté, Drago o Renato tienen poco fondo físico y O Fabuloso nos muestra sus genialidades cada vez con más tacañería… Estos son algunos de los defectos que desde mi ignorancia veo en el equipo, y que pueden ser culpa de la estrategia (y por tanto del entrenador), de los propios jugadores, del equipo técnico y el preparador físico, de los psicólogos del equipo, del responsable de los fichajes o del mismo Presidente por crear falsas expectativas y haber hecho unos fichajes durante los últimos años que no han podido sustituir en calidad a las personas que han marchado.
También puede ser un problema de actitud, es decir se tienen las habilidades, pero se ha perdido la ambición, la seguridad del equipo en sí mismo, la garra, la responsabilidad y la moral, en una palabra… Hasta la jornada 12 (partido en casa con el Málaga) los resultados fueron excelentes y se hablaba del Sevilla como posible competidor de los dos grandes para el título de liga. Después hubo una racha malísima, donde llegó a estar sexto. La victoria ante Osasuna le permitió volver al cuarto puesto, ayudado en gran medida por la mediocridad de los equipos que optan a esa plaza. Hay que reconocer que lamentablemente el sentimiento general en la afición es de que el equipo no está al nivel esperado.
¿O simplemente estamos asistiendo al final de una época gloriosa?, un final que tarde o temprano tenía que llegar si no se hacían las cosas muy bien. La Copa puede salvar con honores la temporada, aunque el Atlético de Madrid ha llegado a un puesto 10 tras unas primeras jornadas en zona de descenso y tras una progresión importante. Está con la moral alta y el Sevilla la tiene ahora mismo por los suelos. Vuelco a pedir por tanto el apoyo masivo e incondicional de la afición en la final.
Si ésta es la cruz del partido de ayer, la cara fue la afición y especialmente los Biris que no dejaron de animar ni un minuto, incluso después del segundo gol del CSKA y hasta los minutos de descuento, pasando del “vamos mi Sevilla, vamos campeón” a raíz del
Julián
CRONICA DE UNA MUERTE ANUNCIADA
En este artículo me gustaría tratar el tema de debate por excelencia en el sevillismo hoy día: la idoneidad o no para el banquillo de Manolo Jiménez. Pero a diferencia de otros artículos que he leído al respecto quisiera orientarlo desde el punto de vista de las ciencias del comportamiento social y la difusión de rumores, pero sin tecnicismos ni erudiciones, ni entrando en grandes profundidades.
Desde casi los inicios de
Los aficionados de cualquier club desean fundamentalmente dos cosas:
1) Que su equipo gane partidos y sume puntos, de forma que consiga sus objetivos que están en función de cada club: desde la permanencia a conseguir el triplete como ocurrió con el Barcelona la pasada temporada. Esto es lo principal para cualquier aficionado que lleve en el corazón los colores de su equipo.
2) Que su equipo juegue bien, que juegue bonito, que divierta, sin que esto sea óbice para el punto anterior. Esto es lógico, porque además de amante de unos colores, los aficionados son espectadores de un espectáculo y quieren ver buen juego porque han pagado a cambio.
Hasta el primer tercio de esta temporada los jimenistas defendían la idea de que el equipo lograba los objetivos: se había clasificado la temporada anterior para la Champions con pase directo, estaba vivo en las tres competiciones de ésta temporada y hasta los medios de comunicación de Madrid llegaron a considerarlo un tercero en discordia, junto a Madrid y Barcelona, para obtener el título de liga. Consciente o inconscientemente los jimenistas hacían proselitismo de sus ideas en sus conversaciones al respecto.
Por otro lado y al mismo tiempo, los antijimenistas defendían la idea de que si bien hasta el momento se estaban cubriendo los objetivos, el juego del equipo distaba de ser brillante. Hacía un mal fútbol, aburrido, predecible, salvo en muy determinadas ocasiones. Lógicamente pensaban que a la larga esto afectaría a los resultados y no se cumplirían los ambiciosos objetivos planteados por el club. También los antijimenistas intentaban difundir sus ideas en las conversaciones con otros sevillistas.
De esta forma, ambas ideas fueron transmitiéndose por un mecanismo que en rumorología se denomina “transmisión en cascada”. Como hay un tercer grupo que no tiene conocimientos suficientes para tener una idea propia sobre las aptitudes del entrenador (me incluyo en ese grupo) adopta las ideas de personas que son de su confianza y piensan que entienden de fútbol, con lo que a su vez se incluye en uno de los dos grupos y difunde las ideas del mismo a terceros.
Además se produce una “polarización de los grupos”, fenómeno también habitual en estos casos, en los que ante unos mismos hechos cada grupo tiende a interpretarlos según sus juicios previos. La información pasa por el tamiz de las ideas que ya se tienen y la persona tiende a buscar en la nueva información una ratificación de sus ideas. Así ante un mismo hecho, por ejemplo un partido de fútbol, unos considerarán que han ganado por suerte, que han jugado muy mal y que Palop ha salvado los puntos, mientras que los otros reforzarán su idea de que se siguen sumando puntos para cumplir los objetivos y que los cambios realizados por Jiménez fueron la clave para
El asimilar una nueva información, con las creencias ya establecidas, se debe a que las personas intentamos evitar los que se denomina en psicología con el término de “disonancia cognitiva” y que no es ni más ni menos que intentamos que la nueva información no entre en conflicto con nuestras creencias y nos “arme un lío” y no sepamos a qué carta quedarnos. Si la nueva información la vemos con las gafas de las creencias previas y conseguimos encajarlas en las mismas evitamos esa situación. Obviamente esto se da en todos los órdenes de la vida.
Pero he aquí que durante las últimas jornadas, la predicción de los antijimenistas empieza a cumplirse. El equipo no solamente juega mal, sino que además pierde todos los partidos y dan una imagen de impotencia tan desastrosa como contra el CSKA o el Español. Aquí entra en juego el concepto de “profecía que se autocumple”, común a muchas ciencias sociales y que en este caso viene a decir que de tanto criticar al entrenador y al equipo y esperar que sean incapaces de conseguir los objetivos con este entrenador, los propios jugadores y
Se ha realizado experimentos en los que se ha tomado a dos grupos de alumnos con un consciente intelectual promedio igual, pero al profesor de uno se le ha dicho que son superdotados y al del otro que su inteligencia como promedio es inferior a
Por el mecanismo de expansión de las ideas, en este caso antijimenistas, en cascada, la inmensa mayoría que inicialmente no era antijimenista va asumiendo las ideas de éstos ya que ven que se va cumpliendo sus expectativas y hasta algunos que originalmente eran jimenistas, pasan al grupo de opinión contrario ante la evidencia de los hechos incontrovertibles. Ya no hay excusas de bajas, de demasiados partidos en poco tiempo, etc… y por tanto no pueden justificar los malos resultados y el pésimo juego del equipo.
La Profecía que se Autocumple suele funcionar con frecuencia en la vida normal y creo que estamos ante uno de esos casos en que al final se cumplirán las predicciones pesimistas y Jiménez será incapaz de cubrir sus objetivos en liga y en copa. Por lo tanto, creo que ha llegado el momento de prescindir de Jiménez en el banquillo, aunque lamente decir esto porque indudablemente es un gran sevillista, pero su actitud y la del equipo ya está contaminada por las predicciones de los antijimenistas y así el Sevilla tendrá muy difícil salir de la pésima racha en que se encuentra, tanto de juego como de resultados. Debo dar mi opinión en este sentido aunque a estas alturas de la liga quizá no sea el momento de cambiar al entrenador ya que prefiero ver a un Sevilla con una actitud ganadora, aunque sea a costa de la destitución de un entrenador que no es un mercenario y sí siente sus colores.
Julián