viernes, 28 de mayo de 2010

Lo han vuelto a hacer

Hace tiempo que cuento una anécdota que ocurrió en un telediario de Telecinco. No es más que el reflejo de la hipocresía y la subjetividad que imperan en este país, y por extensión, en sus medios de comunicación (o quizá sea al revés, no sé).

El caso es que salió una noticia en tono muy crítico, denunciando la práctica de algunos dueños de perros de caza de, una vez terminada la temporada, ahorcarlos en árboles o dejarlos atados hasta que mueran de hambre. Al reportaje, muy bien elaborado por cierto, y con imágenes bastante duras, le sucedió la noticia de la última corrida de San Isidro, y el "arte" con el que los toreros que participaron habían ajusticiado a las reses. A mí me dejó helado. Supongo que a muchas otras personas no.


Pues hoy ha vuelto a suceder. Ponen, también en Telecinco, un reportaje denunciando la escasa normativa que existe en este país para proteger los derechos de los animales, en comparación con otros países europeos que están a años luz de nosotros en sensibilidad en este ámbito. Ponen de ejemplo el trabajo que hace una protectora de animales para perseguir a dueños de perros que los tienen en condiciones lamentables de cuidado e higiene. Y dos noticias más tarde, se mofan del susto que se llevó en el día de ayer el presidente del At. Madrid cuando un toro se fue contra las vallas y estuvo a punto de saltar en el punto que este hombre se encontraba.

Y es que el ajusticiamiento de un animal en una corrida de toros debe ser muy gracioso.

jueves, 20 de mayo de 2010

Va por ti, Antonio

Hoy, por fin, y en el mejor momento, sí se ha visto al Sevilla de las grandes ocasiones. Ante un equipo enormemente motivado y que ha jugado bastante bien al fútbol, el equipo más grande de Andalucía le ha echado la casta suficiente para sacar adelante una final que nos lleva, a la mayoría de sevillistas, a conocer nuestro sexto título. En la vida hubiéramos soñado algo así hace 10 años.

Y al equipo lo han llevado en volandas una afición como no hay ninguna otra, que se ha volcado y se ha desplazado más de mil kilómetros para acudir a la encerrona del Camp Nou. Encerrona en el sentido de que la Federación Española de Fútbol haya elegido de manera vergonzosa esa sede, que beneficiaba enormemente a una afición, la del At. Madrid, y perjudicaba enormemente a la nuestra. Pero ahí ha estado la afición sevillista respondiendo.

Y también en volandas, estoy seguro, ha llevado al equipo nuestro querido Antonio Puerta, que desde el tercer anillo ha dado las alas a nuestros jugadores para que corrieran, lucharan y se dejaran el alma en este partido. Y todos se han acordado de Antonio. Este título, por supuesto, también es suyo.



Buen planteamiento de Antonio Álvarez en el día de hoy. El fútbol virtuoso sigue sin aparecer, pero ni falta que hace. Hoy había que ganar, y ha sabido perfectamente leer el partido. Y tanto mérito en este título tiene Antonio Álvarez como Manolo Jiménez. Por favor, no lo olvidemos.

Hoy sí hemos sido el equipo que dicen que nunca se rinde. Hoy sí hemos sido el Sevilla F.C. Enhorabuena, sevillistas.

domingo, 16 de mayo de 2010

Mucho que cambiar

He intentado esperar a que terminara la temporada para hacer una reflexión más profunda de todo lo que ha pasado en estas últimas semanas de Liga. Lo cierto es que lo del partido de hoy me parece que no nos lo merecíamos ningún sevillista, y la directiva tendrá mucho que analizar.

Desde que Antonio Álvarez cogió las riendas del equipo no se ha visto nada de nada. Dudo que el resultado hubiera sido peor si Manolo Jiménez se hubiera quedado. Sé que es fácil hacer este análisis a posteriori, y yo mismo reconocí tras el partido del Xerez que no tenía claro cual era la mejor solución, pero yo he terminado indignado todos y cada uno de los últimos partidos del campeonato. En algunos hemos ganado, incluso hemos goleado, pero lo cierto es que la imagen del equipo siempre ha sido la misma. Un grupo de futbolistas que no sabían a qué jugaban (dirá Antonio Álvarez que el equipo no ha tenido tiempo de asimilar sus esquemas de "juego virtuoso"), un estado físico lamentable, probablemente el peor de todos los equipos de Primera División, y un buen grupo de jugadores que no luchan, no corren, no pelean... en definitiva, que no lo dan todo por el escudo que llevan en la camiseta (de este grupo se salvan sólo un puñado, la mayoría de los canteranos y poco más).

Con esta actitud, con este espíritu y con esta fortaleza tenemos que afrontar ahora una final de Copa del Rey. Por suerte, a un solo partido puede pasar cualquier cosa, pero me da pánico pensar cómo va a ser ese partido.

Lo del partido de hoy con el Almería, repito, creo que no se lo merecía esta afición. Yo cuando terminó el partido reconozco que no podía ni siquiera estar feliz. La felicidad por el gol de Rodri rápidamente me llevó de nuevo al estado de cabreo desproporcionado que había tenido durante el resto del partido. No puede ser que en un partido en el que el Sevilla se juega tanto, el equipo salga con esa actitud "pasota" con la que salió.

No puede ser que ante un equipo de mitad de la tabla que no se jugaba nada, la sensación fuera que ellos se jugaban la vida y nosotros no.

No puede ser que un jugador se pase el partido sin oler un balón y además insultando a los colegiados hasta que lo terminan expulsando.

No puede ser que nos hayamos salvado, entre otras cosas, porque el árbitro no pitó un penalti clarísimo por manos de Stanckevicius a poco de comenzar el choque (muchos partidos nos han robado esta temporada, pero hoy hay que reconocer lo que es justo).

No puede ser que el entrenador no tenga claro lo que tiene que hacer en un partido tan crucial, sentando y levantando a los jugadores del banquillo sin saber por donde meterle mano al partido.

Y no puede ser que lo que nos haya metido finalmente en Champions sea un golazo... ¿lo habéis visto? Un GOLAZO, con mayúsculas, de un canterano de 19 años que se ha dejado la vida en el campo como si cobrara un sueldazo... lo que cobran otros que ni siquiera corren.



Esto no puede volver a pasar la próxima temporada. He dicho una y mil veces que la afición del Sevilla F.C. no se debe creer lo que no es. Que hemos llegado a donde hemos llegado desde la humildad. Y que a veces le hemos exigido al equipo más de lo debido. Puede parecer que toda esta crítica va en contra de lo que he defendido tantas veces. Pero también he dicho siempre que lo que no se le puede exigir a equipo es que gane siempre, pero lo que sí espero de los jugadores del Sevilla es que den la vida por el escudo. Después las cosas saldrán o no saldrán, los resultados acompañaran o no. Pero la actitud siempre se la voy a exigir.

De poco me sirve que le metamos 5 goles a un Racing ante el que no hicimos prácticamente nada, sino que el equipo contrario se suicidó literalmente y nos regaló el partido. Probablemente ese día cualquier equipo le habría hecho 5 goles al Racing. Porque con un partido igual de malo, ante el Valladolid, terminamos perdiendo simplemente porque ellos lucharon y corrieron 50 veces más que nosotros.

Ojala ganemos la Copa del Rey el próximo miércoles sin necesidad de que a nadie le dé un ataque al corazón como en el día de hoy. No sé si eso es un sueño.