A punto de saltarnos el guión

Creo que en la noche de hoy Unai Emery hizo lo que tenía que hacer. Rotar y dar descanso a jugadores pero sin tirar un partido, algo que pedían no pocos sevillistas pero que yo considero, aparte de absurdo, poco profesional.

Y el Sevilla, con todo esto, estuvo bien plantado en el primer tiempo. Imagino que el objetivo de esta primera mitad era aguantar el cero a cero para que el Barcelona se pusiera nervioso. El equipo, defendiendo muy bien, no generaba ni una sola ocasión de peligro. Y en una que tuvo marcó gol. Jugada a balón parado con pase largo de Rakitic, centro perfecto de Koke (sí, he dicho de Koke) y remate fantástico de cabeza de Botía.

Conclusiones de este primer acto del choque: que el Sevilla se fue quizá con mayor premio del merecido (aunque, eso sí, la jugada del gol fue fantástica), que definitivamente Babá no está para nada (con él en el campo jugamos con uno menos), que Koke empieza a parecer otro jugador (a ver si es verdad), que Jesús Navas tiene gasolina para lo que haga falta y que a mí, personalmente, Manu del Moral sigue sin convencerme.

En la segunda parte creo que el equipo se equivoca al salir excesivamente encerrado atrás. Y la presión del Barcelona genera una jugada por banda que termina en gol de Villa. En ese momento, Unai da descanso a Medel y minutos a Kondogbia.

Y al poco tiempo, en un balón que se le marcha por banda a Andrés Hiniesta, Velasco Carballo concede saque de banda ¡para el Barcelona! El regalo del trencilla lo aprovecha el equipo catalán para montar una jugada rápida que culmina con gol de Messi.

En ese momento el entrenador sevillista hace lo que creo que tiene que hacer. Con 2 a 1 en el marcador, un partido más que abierto y un papel dignísimo del grande de Andalucía no se pueden, bajo ningún concepto, dar por perdidos los puntos. De manera que Emery saca del campo a Babá e introduce a Negredo, con lo que por primera vez en el partido jugamos con 11 jugadores.

Y con esto y el cambio de actitud de los jugadores ante la necesidad de irse arriba a por la victoria llegaron los mejores minutos del Sevilla en el partido. Y no arrancamos algo positivo del Camp Nou porque perdonamos demasiado. Llegamos a encerrar al Barcelona y generar varias ocasiones claras de gol, pero el eterno problema de esta temporada, la falta de definición, evitó que el Sevilla se volviera hoy a la capital de Andalucía con algún punto.

Por lo demás, yo estoy satisfecho del trabajo realizado por los jugadores ante el mejor equipo del mundo y de la profesionalidad demostrada por nuestro míster.

Y ahora, a pensar en la semifinal de Copa.